Enlaces accesibilidad
Roland Garros 2013 | Primera ronda

Nadal supera de menos a más su debut en Roland Garros

Por
Nadal debuta con una trabajada victoria en Roland Garros

Rafa Nadal ha debutado con mucha pelea en la tierra parisina de Roland Garros ante el alemán Daniel Brands. El mejor tenista español de todos los tiempos ha tenido que remontar ante un rival tan grande como duro para clasificarse para segunda ronda en 2 horas y 54 minutos por 4-6, 7-6 (5), 6-4 y 6-3.

El 'amo de la tierra' ha sumado este lunes la victoria número 53 en el Grand Slam que ha ganado en siete ocasiones y en el que este año busca el récord de victorias que posee el argentino Guillermo Vilas -58- y así convertirse, con 59, en el único jugador de la historia que levante el trofeo de ganador de un grande en ocho ocasiones.

Pero para empezar ha tenido un duro escollo. Un jugador casi desconocido, inédito en la trayectoria de Rafa y ante una abarrotada pista central. Una ocasión inmejorable para desnudarse de complejos y tratar de exhibirse ante las televisiones de todo el mundo. Ahora le espera en segunda ronda el eslovaco Martin Klizan que eliminó al estadounidense Michael Russell.

La tremenda envergadura del germano de 1,96 metros le supone una gran ayuda para la efectividad de su primer servicio. Tuvieron que disputarse ocho juegos para que el mallorquín tuviera su primera oportunidad de rotura merced a dos errores no forzados de Brand, que por entonces sumaba 12.

Rafa no pudo aprovechar la ocasión porque su rival, número 59 del mundo, además de sacar con fuerza y colocación, tiene una derecha abierta y plana muy dolorosa que utilizó sin piedad para remontar el juego en la grandiosa pista Philippe Chatrier.

El chasco para el cuarto jugador del mundo por no conseguir el break supuso uno aún mayor al perder su servicio en el siguiente juego. Nadal permitió que Brands entrase con su derecha paralela, mortal de necesidad, y además remató su tortura con una doble falta. Con el 5-4 y el saque a favor, el de Deggendorf se apuntó la primera manga en 36 minutos y mandó al de Manacor a estudiar cómo tumbar a un gigante.

Un disputado 'tie break'

Del descanso el balear volvió decidido a subir su nivel y volvió a tener una oportunidad de romper el servicio, que tampoco aprovechó; un ace y una derecha ganadora se lo impidieron.

Klaus Langenbach, entrenador de Brands, había mostrado a su pupilo cómo neutralizar el juego del exnúmero uno: la primera instrucción era meterse en la pista a base de mandobles para que Rafa tuviera que irse al fondo sin tiempo de activar con comodidad su terrible drive, la segunda era no perder la confianza en su saque y su servicio y la tercera provocar las dudas del manacorense para que sus bolas no corrieran tanto como de costumbre sobre la arcilla.

De nuevo en el octavo juego del segundo set Nadal estuvo cerca de ponerse por delante pero, con 0-30, Brands otra vez apeló a su potencia para sobreponerse y mantener su saque. A continuación Rafa, escarmentado por la primera pérdida de servicio, sacó más concentrado y mantuvo su saque.

Pero también Brands, que con potencia aguantó hasta el tie break y en el desempate llegó a disfrutar de un 0-3, que ponía contra las cueras al heptacampeón. Verse tan arriba hizo que le entrara el vértigo y empezaron a llegar los errores.

Nadal no perdona cuando al rival le entran las dudas y remontó para llevarse el juego de desempate y el siguiente, el primero del tercer set y con saque de Brands. Su primer rotura de servicio.

Nadal se agranda

Los nervios comenzaron a encoger la derecha de Brands, que ya no encontraba las líneas con tanta facilidad. Por contra, Rafa iba jugando un poco más dentro de la pista y conectando sus drives paralelos, que tanto daño hacen.

También mejoraba sus estadísticas de golpes ganadores con su revés, más profundo. Además, de las dudas con su propio saque pasó a utilizarlo para salir del apuro en juegos como el segundo de la tercera manga, levantando las otras tres bolas de break de que llegó a disponer el teutón.

Nadal supo cambiar a tiempo para no jugarle bolas tan altas como las del inicio del partido, con lo que el espigado Brands ya no conectaba las derechas con tanta comodidad. No obstante, el tercer set del partido, segundo en la cuenta de Nadal, se decidió por la cabeza fría del español a la hora de administrar su única ventaja.

Más fácil fue el último, con un Brands ya desfondado y un Rafa crecido. Su juego desde el fondo de la pista volvió a parecerse al de su paso arrollador en anteriores ediciones, logrando que la iniciativa del rival se volviera en contra de este con golpes profundos.

Los peloteos largos eran ya todos de su propiedad y el drive paralelo volvía a encontrar hueco. Brands ya no se encontraba tan cómodo pisando la zona media de la pista y encarando la red, puesto que el passing de Nadal hacía daño por fin.

El inicio del último set fue similar al anterior, pero varió que la culminación fue con un Nadal ya del todo amo y señor del partido, ganando sus saques en blanco y permiténdose el lujo de rematar la faena al resto, casi tres horas después.