El Atlético de Madrid se duerme en los laureles ante el Rayo Vallecano y termina 4-3

Ficha técnica

4 - Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Arda Turan (Adrián, m. 66), Mario (Tiago, m. 62), Gabi, Koke; Diego Costa (Cristian Rodríguez, m. 55) y Falcao.

3 - Rayo Vallecano: Dani Giménez; Tito, Amat, Casado; Trasshorras, Javi Fuego, Adrián (Delibasic, m. 70); Piti (Lass, m. 53), Leo Baptistao, José Carlos; y Nicki Bille ('Chori' Domínguez, m. 57).

Goles: 1-0, m. 29: Mario Suárez culmina una jugada de Diego Costa. 2-0, m. 48: Koke marca a pase de Diego Costa. 3-0, m. 51: Arda Turan remata un centro raso de Juanfran. 4-0, m. 55: Falcao, de penalti. 4-1, m. 82: Delibasic remate un centro desde la derecha. 4-2, m. 85: Delibasic culmina un envío raso desde la izquierda. 4-3, m. 88: Leo Baptistao aprovecha una serie de rechaces en el área.

Árbitro: Javier Estrada Fernández (C. Catalán). Amonestó a los visitantes José Carlos (m. 42), Javi Fuego (m. 54) y Adrián González (m. 68).

Incidencias: partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga en Primera División, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 45.000 espectadores

El Atlético de Madrid es un equipo feliz, pero sigue siendo el Atlético, y a punto estuvo de darse un disgusto a sí mismo a consecuencia de la relajación propia de un partido dominado con autoridad sobre el vecino, pequeño equipo que si tiene cinco minutos más igual le da la vuelta del todo al marcador. Tras un plácido e ilusionante 4-0 se pasó al 4-3 en apenas seis minutos, pero no hubo tiempo para más y el Atlético sigue invicto, con 7 puntos y un partido menos [Datos y estadísticas del Atlético 4-3 Rayo.

Unos se durmieron y otros despertaron demasiado tarde. "Me voy un poco contrariado, porque en los ocho o nueve minutos de la segunda parte no hemos sido nosotros. El Rayo que yo quiero y que podemos ser todos los domingos es el de los últimos 35 minutos. Me voy satisfecho con el hecho de que nos hayamos ido para arriba con 4-0", lamentó por su parte el entrenador vallecano, Paco Jémez.

Si a la afición rojiblanca -que se pasó buena parte de la segunda mitad del partido cantando, saltando y recordando al otro vecino, al de Chamartín, con cánticos de actualidad como "No tiene equipo, Mourinho no tiene equipo..."- le dicen que una renta de cuatro goles casi es insuficiente, no se lo creen. O sí, y se encogen de hombros pensando que "esto es el Atleti"; tampoco sería la primera vez.

Pero ahora mismo el Atlético de Madrid es un equipo feliz, que vive una fiesta en este inicio de temporada y se ha permitido celebrarlo en la noche del domingo contra el Rayo Vallecano, al que dominó durante 80 minutos. Los otros diez, que eran los de las sobras, casi pasan a la historia.

La goleada esta vez no la comandó el colombiano Radamel Falcao, que también marcó su golito, sino el brasileño Diego Costa, que dirigió la jugada del 1-0, dio el pase en el 2-0 y provocó el penalti que transformó el 'Tigre'. Los goles se los repartieron como buenos compañeros Mario Suárez, Koke, Arda Turan y Falcao.

Quizá lleguen más adelante los disgustos, la desesperación y el "¿por qué somos del Atleti?", pero en el ahora el conjunto de Diego Simeone es un equipo que se exhibe, que tiene un estilo muy claro de juego y unos jugadores bien acoplados en desarrollarlo.

"El partido lo planteamos bien hasta los cambios", analizó después Simeone. "Me apuré en los cambios y la responsabilidad del final del partido es mía", afirmó un entrenador que alabó el papel de Diego Costa. "Apostamos por él. Lo vemos cada día mejor, es un chico valiente, fuerte, agresivo, puede jugar por dentro y por fuera y creíamos que era el jugador para aprovechar los espacios por detrás de Casado y Tito".

El Rayo de Paco Jémez también es un grupo arreglado, que no especula, que conduce bien y que crea ocasiones con un centro del campo de calidad. Más flojo en defensa, eso sí, por eso encajó los goles con bastante facilidad.

Eso ayudó a que el Atlético luciera pegada, sin aprovechar las autopistas abiertas en las bandas vallecanas pero creando ocasiones desde el principio. Un disparo de Diego Costa en los primeros instantes, despejado por Dani Giménez; un tiro alto de Falcao, mediado el primer tiempo, y el gol, en una jugada del brasileño por banda izquierda, beneficiado por un rechace y culminada por Mario Suárez en el 1-0.

A la vuelta del vestuario, Casado sacó un balón picado de Arda Turan bajo palos, y a continuación llegó el aluvión de goles. Diego Costa participó de forma decisiva en dos de ellos. En primer lugar, en el 2-0, prácticamente un calco al primer tanto del encuentro, con una nueva galopada por banda hasta línea de fondo y un pase atrás rematado por Koke. Por la otra banda, Juanfran sirvió el 3-0 a Arda con un servicio raso.

Y de nuevo Diego Costa, por cierto un exjugador del Rayo, provocó un penalti de Javi Fuego, transformado con potencia por el colombiano Radamel Falcao.

Fin aparente de la historia, hasta que el Atlético decidió evadirse del partido sin esperar al pitido de Estrada Fernández y recibió tres sacudidas de su dulce sueño en siete minutos locos, con un doblete de Delibasic y otro gol embarullado del brasileño Leo Baptistao, que no fueron a más, para alivio de los anales rojiblancos.