Gemma Mengual, se va el gran icono de la 'sincro' mundial

• Gracias a ella, la natación sincronizada se ha hecho accesible al gran público
• En este deporte, Mengual ha sido sinónimo de belleza, pasión y carácter

El ejercicio del oro

La vi por primera vez en el 2001, en el Mundial de Fukuoka, en Japón. Llevaba ya cuatro años siendo la solista española en una disciplina muy minoritaria, que luchaba por ganarse el respeto incluso de los deportistas que veían la sincro como una mezcla de ballet y circo, no como deporte. Ya era una nadadora diferente. Muy expresiva, dotada de un gran talento para la interpretación, para el arte. Me llamó la atención su gran físico y esa capacidad para comunicar con las manos y con la mirada, tan suyas. Un don que sólo he visto en la gran Virginie Dedieu. Fue un Mundial revelador porque la sexta posición de Gemma en Sólo y la quinta en Dúo y Equipo supusieron una mejora espectacular para España y tambien porque hicieron su debut las Anastasias, Davidova y Ermakova que marcaron para siempre la sincro mundial.

Despues llegó el Mundial de Barcelona en el 2003, el arranque definitivo, el comienzo de una década prodigiosa. Virginie nos dejó una de las mejores rutinas de la historia, el Ave María, y Gemma la constatación de que había nacido una estrella, la más grande que ha dado jamás la natación española. Ganó sus primeras tres medallas internacionales e inició una espectacular carrera que se ha cerrado con 36 medallas, 17 de ellas en Campeonatos del Mundo. Además de las dos históricas platas olímpicas en Pekín. Se convirtió en la líder del equipo y en una de las grandes referentes mundiales.

El equipo español de natación sincronizada ha vuelto a casa con las siete medallas conseguidas en el Mundial de Roma. Con ellas, Gemma Mengual, la deportista española más laureada.

Gemma apostó por el arte, por expresar en el agua sentimientos y emociones. Fue pionera en romper moldes, en dotar de "alma" a la sincro, y tambien en interaactuar con el espectador. Gracias a ella y al gran trabajo de Anna Tarres, la sincro se ha hecho accesible al gran público. Despues vino su gran evolución técnica, única arma que tenía para luchar contra las rusas y contra el "establisment" de las juezas. Probablemente esta ha sido su gran decepción en la sincro. La lucha, el pulso que ha mantenido por ganarse el respeto de las juezas, por coseguir las notas que se había ganado con creces en el agua. Todavía hoy sigue sin haber valentía.

La pareja española realizó un buen ejercicio con la música de Albéniz que les valió otra medalla de plata en el Mundial de Roma, con una puntuación de 98.333, medio punto por detrás de la pareja rusa.

Nunca olvidaré sus lágrimas en Roma en el 2009, su desesperación cuando volvieron a puntuarla por detrás de la rusa en la final de la rutina libre del sólo. Su derrumbe emocional. Las lágrimas de la mejor solista mundial de los últimos años que hablaban de impotencia y de frustración. Pero Roma nos dejó tambien el "Yesterday", la mejor interpretación de su carrera. A ritmo de los Beatles derrochó emociones en el agua, se vació por dentro para buscar la unica medalla y el único título que se le ha resistido, la de campeona del mundo.

La nadadora Gemma Mengual enseñó en el Torneo Ciutat de Barcelona el ejercicio libre que realizará en el Mundial de Natación de Roma. Mengual usa una versión de Ray Charles del 'Yesterday' de los Beatles para conseguir subir a lo más alto del podio.

Se va, con casi 35 años, el gran icono de la sincro mundial. La belleza, la pasión y el carácter. Pero siempre nos quedarán esas manos bailando fuera del agua, esas posturas imposibles, ese rocket-spagat tan explosivo... y esa mirada penetrante, desafiante, que traspasa la piel y te llega directa al corazón. Gracias Gemma.