El Real Madrid se estrella en casa contra el Montepaschi
- Los de Laso han perdido en la segunda jornada del 'Top 16' por 19 puntos
- El macedonio McCalebb, protagonista del encuentro tras lograr 25 puntos
Ficha técnicaFicha técnica
69. Real Madrid (15+19+14+21): Llull (8), Carroll (12), Singler (2), Mirotic (7), Tomic (4) -quinteto inicial- Sergio Rodríguez (3), Reyes (17), Carlos Suárez (3), Begic (4) y Pocius (9).
88. Montepaschi Siena (31+16+18+23): McCalebb (25), Moss (10), Andersen (11), Thorton (8) y Michelori (2) -quinteto inicial- Stonerook (2), Zisis (3), Rakocevic (9), K. Lavrinovic (16) y Aradori (0) y Ress (2).
Árbitros: Jugrenbrand (GER), Ankarali (TUR) y Gkontas (GRE). Eliminado: Stonerook, min.39.
Incidencias: Segunda jornada del "Top 16" de la Euroliga. Grupo F. 8.431 espectadores en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid.
El Real Madrid se ha reencontrado con una de sus "bestias negras" en el baloncesto europeo, el Montepaschi de Siena, que le superó de principio a fin con una exhibición de su base McCalebb, que logró 25 puntos y 36 de valoración.
El equipo blanco sale de su segundo encuentro del 'Top 16' tocado de cara a su objetivo de pasar como líder del Grupo F a los cuartos de final y evitar al CSKA ruso, el mejor conjunto de la competición hasta ahora.
El Montepaschi puso fin a una racha de victorias locales, todos los partidos de esta temporada, ocho en la Liga ACB y cinco en la Euroliga, en la capital de España y el primero de la competición continental en el Palacio de los Deportes.
El club de Siena ya le sacó los colores hace un año y precipitó la temporada pasada la dimisión del entonces entrenador del Madrid, Messina, en un partido del 'Top 16' de la Euroliga (77-95) y luego le batió en la Final a Cuatro en el choque por el tercer puesto. Tampoco había perdido en casa hasta que llegó el Montepaschi la temporada pasada.
El cuadro español no pudo contar con Mirotic en plenitud de facultades. El pívot fue titular tras el golpe en su tobillo izquierdo ante el Caja Laboral el domingo, pero no estuvo a su altura habitual. Reyes fue el mejor en sus filas con 17 puntos, 15 rebotes y 28 de valoración.
McCalebb, estrella indiscutible
En menos de cuatro minutos, McCalebb había endosado cinco puntos y dos personales a Llull, quien se iba enfadado al banquillo. Era una muestra; el principio de un parcial de 22-3 a favor de los italianos que culminaría al final del primer cuarto con un 15-31 y con una sola canasta de dos en once intentos, sonrojante, para los blancos.
Pianigiani sentó en el último minuto de ese periodo a su base estrella con 10 puntos y 16 de valoración.
Al comienzo del segundo cuarto no mejoraron las cosas para los madridistas. Laso ya había utilizado a todos sus hombres, menos a Velickovic de vuelta de una lesión y a Sanz, y el encuentro no cambiaba de signo. A seis minutos para el descanso, el Montepaschi marcaba su mayor ventaja: veinte puntos (20-40). Y con McCalebb en el banquillo y el exmadridista Rakocevic tomanto el mando y desbordando la defensa local.
Laso apostó de nuevo por Llull y ésta vez acertó. Los españoles del Madrid: Llull, Reyes y Suárez, comenzaron la remontada y dominaron el rebote, para llegar al descanso "solo" trece por debajo (34-47). El club blanco llegó al minuto 20 con cinco de 20 en tiros de dos.
Reyes, de nuevo, el mejor de los españoles con nueve puntos, siete rebotes y 14 puntos en la primera parte. Sin embargo, el pívot internacional vio el inicio de la segunda parte desde el banquillo. Incomprensible.
Volvieron los jugadores a la cancha y regresó el recital de McCalebb, ante un Madrid otra vez a la deriva, cuyo principal ejemplo negativo fue entonces Tomic, superado en la zona rival.
En el último periodo, Laso, después de que un excepcional Lavrinovic pusiera otra vez los 20 de ventaja para los de Siena con un triple, encontró la fórmula: Defensa y Sergio Rodríguez, Llull, Carroll, Mirotic y Reyes.
La diferencia llegó a ser de 10 puntos a cinco minutos para el final, pero ya era tarde McCalebb, que dio más asistencias, seis, que todo el Madrid junto, cinco, y Lavrinovic acabaron por liquidar a los madridistas.
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