Móviles 'low cost', una alternativa cada vez más frecuente

Parecen iguales. Algunos incluso comparten la misma resolución de pantalla o el procesador más potente del mercado, pero a la hora de comprarlos, el precio de unos triplica el de otros. Bajar el precio implica hacer sacrificios: en la calidad de los componentes, en diseño, en funciones, en innovación, en recortar el margen, a veces hasta el punto, de vender por debajo del coste de fabricación. Es una guerra comercial que afecta, principalmente, a los teléfonos de gama media y baja pero que tiene consecuencias sobre todo el mercado. De hecho, según Samsung, en España este año se venderán menos móviles que el año pasado, pero los fabricantes ganarán más. La competencia es feroz y la clave, dicen los expertos, es dar con la estrategia adecuada para acabar siendo la marca elegida en el bolsillo del consumidor.