Jordi Serra, agricultor ecológico

El macizo de la Serra Grossa constituye uno de los espacios naturales mejor conservados de toda la isla. Es un área montañosa del interior de Ibiza cubierta en su mayor parte por pinares de pino carrasco. En la zona crece una retama endémica de Ibiza, la Genista dorycnifolia, incluida en el Anexo II de la Directiva Hábitats. Además nidifican varias especies del Anexo I de la Directiva de Aves y es una de las zonas menos alteradas de la isla. De esta área destaca su orografía e irregularidad, con elevaciones de 300 a 400 metros de altura separados por pequeños valles y torrenteras donde se localizan algunas de las mejores tierras cultivables de la isla.

Este espacio declarado Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) sorprende por su frondosidad debido a los bosques de pinos y sabinas y por los matorrales de romero y enebro, entre otras especies de monte bajo como brezos, genistas y madroños conformando los hábitats para especies de aves incluidas en la Directiva Aves, como el alcaraván, el chotacabras gris o la terrera común. En la zona, se pueden encontrar ejemplares de gineta ibicenca, una especie endémica de la que no quedan muchos individuos.