Cuando los tacones son una forma de discriminación

Obligar a una empleada a llevar tacones en el trabajo es una forma de discriminación. Y quien dice llevar tacones, dice ir maquillada o vestir falda en lugar de pantalones. El parlamento británico ha publicado un dictamen apoyando la reclamación de una mujer que fue despedida por ir a trabajar con zapato plano. Según sus señorías, se les puede obligar a ser buenas profesionales, pero no a parecer atractivas.