Vivanco, compartiendo cultura del vino   Los brindis del Titanic yacen con sabor a sal 20/04/2017 10:39

Estaba destinado a ser, junto al Olympic y al Gigantic, el barco más lujoso del mundo. El más elegante, el de mayores dimensiones, el más respetado por su competencia. Eran con toda certeza atributos de peso para que Joseph Bruce Ismay, presidente de la compañía de buques White Star Line, y lord William Pirrie, presidente de los astilleros Harland and Wolff, se embarcaran en la concepción y posterior construcción de estos tres barcos que deben su nombre a la mitología griega. El pasado viernes, 14 de abril, se cumplieron 105 años del hundimiento del Titanic. Un naufragio que conmocionó e indignó al mundo por algunas deficiencias de seguridad evitables. El transatlántico, por ejemplo, sólo disponía de botes salvavidas para 1178 pasajeros, poco más de la mitad de los que iban a bordo en su viaje inaugural. Tras la tragedia del Titanic se implementaron importantes mejoras en la seguridad marítima, como la creación en 1914 del Convenio Internacional para la Seguridad de la Vida Humana en el Mar, que aún hoy rige la seguridad marítima.

Vivanco, compartiendo cultura del vino
Más opciones