Sonideros   Jazz: the road to love 24/09/2017 01:00:14

El título de nuestro programa de hoy, se inspira, por un lado en John Coltrane y su "A love supreme", a quien recordamos en el 50 aniversario de su fallecimiento y, por otro, en el último disco del brillante guitarrista Kenny Burrell, "The road to love", todavía en activo a los 86 años de edad. Y vamos a lanzar una mirada retrospectiva hacia algunos de los grandes artistas – no tan conocidos por el gran público- que han marcado la historia del jazz en el siglo pasado. Y comenzamos con la cantante y pianista Shirley Horn, contemporánea de Kenny Burrell, y su versión del gran tema que hiciera célebre Ray Charles, "Hit the road Jack". Uno de los referentes de este último fue el semi olvidado Louis Jordan, quien, con su Orquesta Timpany Five, sentó -desde el jazz y el jump blues- las bases del blues urbano, el r&b e incluso en rock & roll; de él escuchamos "Is you is or is you ain't my baby". Una de las grandes damas blancas de la época dorada del jazz fue la cantante y compositora Peggy Lee, de quien programamos su gran versión del clásico "Fever". La innovación y el riesgo corren de la mano, o mejor dicho, de la voz de la gran Betty Carter quien luce su talento en "Babe's blues". Un disco potente y misterioso es "Soul battle", grabado en 1962, el encuentro inédito tres saxofonistas de excepción, provenientes de entornos muy diversos: Oliver Nelson, King Curtis y Jimmy Forrest. La vida musical de Julie London fue breve pero intensa; a ella le debemos esa gran versión del "Cry me a river", una canción compuesta inicialmente para que la grabara Ella Fitzgerald. Del lado masculino, una figura inolvidable es Mel Tormé, a quien oímos en una preciosa versión de "Too darn hot" de Cole Porter. Carmen Mcrae es otra de las grandes figuras nacidas en los años 20 del siglo pasado, con una calidad y riqueza tímbrica en la voz que aprecia en la magnífica interpretación de "Old devil moon". Y terminamos el recorrido por algunas de los muchos caminos del jazz que llevan hacia ese amor total o pasión por la vida, con el talentoso y heterodoxo Slim Gaillard y su original interpretación de "How high the moon".

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