Avistamientos cetáceos

Pocos son los que saben que entre la costa balear y la costa catalana hay una ancestral autopista de cetaceos. El ministerio de  medioambiente ha admitido a trámite una dcelaración como zona especial para protegerlo. Pero las entidades ecologistas piden blindar este corredor natural a todo tipo de activiadades dañinas. Y es que en él podemos encontrar ballenas rorcuales, la segunda ballena más grande del mundo, de 17 a  25 metros de largo que en primavera viaja hasta el mar de Liguria para aparearse, hasta especies como el delfín listado, el delfin molar y el calderon gris. Nos diponemos a constatarlo durante ocho horas a bordo de un velero contratado por la Associació Cetacea, que cada  dos semanas organiza una salida para fotoidentificar a estos mamíferos magnéticos des del puerto de Vilanova y la Geltrú, en la costa Barcelonesa.