La República del Chad pasó a engrosar la lista de países africanos exportadores de petróleo en octubre de 2003. Es un país muy grande con una población pequeña, con un nivel de desarrollo muy bajo y muy desconectado de la realidad internacional, tanto a nivel geográfico como político, y dividido entre un norte desértico y árabe, y un sur más rico, subtropical de población negra y cristianizada.
Inestable políticamente desde su independencia de Francia, fué en 1990, tra el golpe de estado de su actual presidente, cuando sucedió el primer intento de explotación petrolífera, aunque hasta principios del siglo XXI no se llevó a cabo, gracias al apoyo del Banco Mundial que estableció para las empresas transnacionales un marco jurídico que compensara la tremenda inversión.
En los primeros años el gobierno triplicó sus ingresos anuales, aplicando por ley un alto porcentaje a los sectores prioritarios para la reducción de la pobreza, aunque en los últimos años, tras un cambio en la ley, el gobierno utilizó estos ingresos para incrementar el gasto militar, de forma que la inestablilidad política, casi endémica, se agravó, y la tasa de desnutrición crónica, que es una de las mayores del mundo, también se agravó. La falta de recursos primarios es tan grande, que uno de cada 5 niños morirá antes de cumplir los 5 años, por enfermedades que deberían ser cotidianas (24/07/12).
