Células solares o fotovoltaicas

La energía solar fotovoltaica es una fuente de energía cien por cien renovable, inagotable y no contaminante que se encuentra en una fase avanzada de desarrollo, instalación y aprovechamiento. En 2018 representó casi el 7 % de la potencia instalada en nuestro país y la tercera fuente renovable de generación eléctrica, todavía muy lejos de la eólica y la hidráulica, aunque durante este 2019 ha experimentado un gran crecimiento. Como explica Luis Castañer, ingeniero de telecomunicaciones y miembro de la Real Academia de Ingeniería, esta tecnología transforma directamente la luz del Sol en electricidad gracias a los paneles fotovoltaicos, compuestos a su vez de las llamadas células solares...
La gran mayoría de las células solares actualmente en el mercado son de silicio mono o policristalino. El primer tipo se encuentra más generalizado y aunque su proceso de elaboración es más complicado, suele presentar mejores resultados en cuanto a su eficiencia, del 22%. El récord de rendimiento --recuerda Luis Castañer-- está cercano al 50 por ciento en células solares empleadas en misiones espaciales donde el factor coste no es tan importante con respecto al prespuesto del proyecto.
Aún así, esta tecnología ya comienza a ser rentable en los hogares, que no solo generan la que necesitan para sus necesidades sino que vierten electricidad al sistema. Según Castañer, hasta ahora había una especie de compromiso entre desarrollar células solares muy eficientes, pero muy caras, o hacerlas muy baratas pero poco eficientes. Sin embargo, en los últimos años han surgido alternativas económicas con un rendimiento más elevado como la perovskita, con rendimientos cercanos al 25% .