Hace unos años Jordi Savall llegó a la “Jungla” de Calais acompañado de su viola de gamba. El impulso lo llevó a tocar entre refugiados, admiró la organización que tenía el campo, distribuido por culturas, por lenguas, por procedencias y en ese momento decidió que tenía que ser parte activa de lo que estaba pasando en esta zona de mundo. Creó el Proyecto Orpheus XXI, hermanado con diferentes entidades de Francia y Noruega con una triple intención: dar una salida profesional a los músicos que han tenido que huir de su país debido a los conflictos, facilitar a los niños y niñas refugiadas la recuperación de sus músicas tradicionales de las que no hay partitura y romper con el estigma de Occidente y Oriente que todavía pesa como una losa. De la experiencia salió un Homenaje a Siria, en el volumen II de su investigación Orient-Occident, en el que participan muchos de los músicos que ahora forman parte de este Orpheus XXI. Están en la fase de presentaciones en directo, el proyecto sigue hasta octubre, pero Savall ya nos avanza que la cosa no quedará aquí y que conseguirán financiación para seguir adelante. Algunas de estos músicos que participan son: Waed Baouhassoun, Moslem Rahal, Driss El Maloumni, Dimitri Psonis, Ballake Sissoko o Rajery. Aprovechamos el programa para volver a escuchar la música de creadores contemporáneos que miran a Oriente desde la Península como Burruezo, Halil Bárcena o Hamza Castro. Escuchamos: Orient-Occident-Oumeima Khalil-Ahjla Zahra-Moslem Rahal-Samai Maqam Bayati; Pierre Hamon-Creire m’en fach; Wael Bouhassoun-Ya Fajr-Ya na Iman; Driss El Maloumi-Improvisation Oud; Burruezo+Medievalia Camerata+Maia Kanaan-El meu Cavaller; Hamza Castro-Escucha el Ney-Sanaï; Halil Bárcena-Allah diyelim daim; Burruezo+Bohemia Camerata-Aman Aman.
