1975. Los últimos fusilamientos de Franco

Con el dictador enfermo y próximo a morir, el Régimen va a ejecutar a cinco condenados por terrorismo en consejo de guerra. Serán los últimos fusilamientos del franquismo. En un momento de presión terrorista, la Polícia establece un cerco y detiene a decenas de militantes del FRAP y ETA. Tras semanas de torturas e incomunicación, la Justicia Militar se hace cargo de las causas y se limitan drásticamente las garantías judiciales. En aplicación de una nueva ley con carácter retroactivo por la que no era necesario acreditar que los imputados estuvieran en el lugar de los hechos, once de los acusados serán condenados a la pena máxima sin posibilidad de recurso. Finalmente, Franco decide indultar a seis, pero autoriza la ejecución de cinco. La reacción internacional es inmediata y reaparece el fantasma del aislamiento. Franco morirá dos meses después y el Régimen morirá matando.