En Kilómetros de radio hemos hablado con el torero Juan José Padilla, que volvió a sacudir muchos corazones este sábado al sufrir una nueva cogida en la Feria del Pilar, en Zaragoza, en el sexto de la tarde. Nos ha descrito con crudeza como desde el primer momento supo que el toro no obedecía al capote, por más que el lo intentara y como desde chiqueros el morlaco iba directo hacia él, hasta que le empitona en el mismo lugar donde había perdido el 7 de octubre de 2011 el ojo. Creyó, dice en la entrevista que mantiene con Manolo Castro y José Luis Carabias, que le estallaba la cabeza y que algo muy malo había pasado, porque fue el impacto ya que esa zona de la cara ha quedado insensibilizada desde el 2011, pero afortunadamente no tardó mucho en darse cuenta de que se recuperaba. En la enfermería le curaron y suplicó al médico que le dejase rematar la feria, porque el cariño del público así lo merecía, y se encomendó a la virgen del pilar para acabar como el deseaba.
Ese mismo sábado, sedado y durmiendo, regresó a Jérez de la Frontera y esta mañana confirmó lo que sintió en la plaza viendo las imágenes de televisión, que el toro en ningún momento obedeció al capote, que el intentó cuando vio lo irremediable lanzarlo a un lado para tirarse al suelo, pero el toro tenía su propia decisión tomada y sin celo ninguno se fue a por el torero. Afirma Juan José Padilla que tiene una familia muy taurina y que saben aguantar cuando ocurren estas desgracias y el seguirá vestiendo el traje de luces mientras le queden ganas para ello. 16/10/16
