Refugiados: una situación trágica

Se cumplen ahora dos años de la trágica muerte del niño sirio Aylan Kurdi, de tres años de edad, que fue hallado sin vida en las costas turcas, cuando su familia intentaba alcanzar Europa, huyendo de una terrible guerra civil. La foto de Aylan dio la vuelta al mundo y reflejó, de manera dramática, el destino de miles de refugiados que huyen de la guerra. Han pasado dos años, y lejos de mejorar la situación, los datos nos sonrojan: más de 500 niños han muerto intentando alcanzar las costas europeas. Y sólo en 2016, más de 5.000 refugiados han muerto ahogados en el Mediterráneo. Sirva otro dato; España se comprometió con las autoridades europeas a admitir 17.337 refugiados, antes de que finalice septiembre de 2017. Según diferentes organizaciones humanitarias, nuestro país no ha acogido ni a 2.000 refugiados cuando escribimos estas líneas. La política de la Unión Europea, es vergonzosa y prioriza, según los expertos, el concepto de seguridad, antes que el de salvar vidas. Hablamos con dos especialistas de la organización Save the Children de lo que hace nuestro país, en esta materia y de lo que hacen otros países comunitarios.