El bosque habitado   Viaje a la Canopea con Francis Hallé 14/08/2016 58:57

Bienvenidos a un bosque habitado por una aventura botánica que cambió para siempre nuestro concepto de riqueza, y que aún tiene que cambiar muchos conceptos convencionales de riqueza. 

La premisa clave es: “Un árbol es una enorme superficie que envía a la atmósfera toneladas de vapor de agua”. Lo dice Francis Hallé. Y es que hace unos 20 años, junto a un equipo de investigadores, trabajando en Gabón, descubrió que cada especie de árbol emite moléculas volátiles específicas. Los ingleses las llaman “volátil organic compound”, y han acuñado el término VOC, que nos habrás escuchado en muchas ocasiones. 

Estas partículas pueden ser de polvo, pero no hay polvo sobre la selva amazónica. Son entonces, los VOC los que sirven de partículas. Y estas moléculas, añade Francis Hallé, pueden ser muy, muy diversas. Los árboles no sólo envían vapor de agua a la atmósfera, sino que también son capaces de controlar el retorno de esta agua en forma de lluvia. Francis Hallé vio en su juventud una nube en el horizonte de la sabana africana y, cuando se acercó, descubrió una pequeña selva bajo aquella nube.

Este programa trata de recordarnos la importancia de la curiosidad, la investigación y los resultados científicos del botánico Francis Hallé, nuestro particular Barón Rampante, que, como en la imaginación de Italo Calvino, habita más tiempo sobre la copa de los árboles que en tierra firme, incluso, incluso ha realizado la mayoría de su trabajo sobre un dirigible que le permite observar la naturaleza arbórea como un mundo sorprendente y desconocido que, gracias a sus enseñanzas, podemos comenzar a intuir. Aún ahora, con más de siete décadas de subirse a la Canopea. 

Y para recorrer las sendas aéreas y ramificadas de este viaje por los mundos insospechados que habitan las prolongaciones de las ramas y las hojas, recurrimos a la gracia e inspiración de las Webb Sisters, habituales voces del coro de Leonard Cohen. 

Y ahora, respira profundo, hazte brotar y crece tanto hacia arriba como hacia abajo, tan abajo y tan alto como puedas, porque estás entrando en el territorio exclusivo de la  Canopea, sin duda, territorio conmovido… #ArribaLasRamas!

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