Os invitamos a echar raíces con arte.
Vuestras propias raíces humanas y las de vuestros árboles, de la mano de Ignacio Abella, quien nos cuenta que la humanidad creció de la mano del bosque y, a su paso, los hombres y mujeres, igual que el resto de mamíferos, dejaban bosques tras de sí, comiendo frutos y diseminando sus semillas. Así lo cuenta una vieja leyenda que habla de la montaña Tamacú. La creación es un evento constante y recíproco entre animales y vegetales. Por el simple hecho de existir, nos damos la vida, nos creamos, nos recreamos y reinventamos ¡Coevolucionamos! Y hubo un tiempo en el que los seres humanos teníamos raíces que nos unían a la tierra y al resto de los seres vivos.
Así que oiremos historias de árboles de la palabra, de hermanamiento, de concejo, árboles de iglesa y de cementerio... De Dendrocracia (el poder de los árboles)... Historias de Abella, de Pepo Paz, de Antonio Lucas. E historias de Fernando Fueyo en la serie Palabras dibujadas (Recuerdos de niño), de Raúl de Tapia que es Raúl Alcanduerca en la entrega del Herbario sonoro (De cómo saborear aliarias), del propio árbol hoy en forma de Abedul (Serie Arbolario) y de Mago de Oz con sus canciones convertidas en un grito por el amor a la naturaleza.
Y es que, como ves, nos acompaña la Comunidad del Bosque.
