Bienvenidos a un bosque habitado por una tentación tan grande en el ser humano contemporáneo como la de apartarse del mundanal ruido, cobijarse en el bosque y prescindir durante una temporada de todo. Un intento por sobrevivir tan sólo con lo que la naturaleza nos da desde el principio de los tiempos. Ser capaces de experimentar durante un momento de autosuficiencia… Ser como Robinson Crusoe, como Genoveva de Bravante, como Tarzán, como Thoreau en “Walden”, convertirnos en anacoretas y eremitas, tan sólo con la compañía de lo que vive y crece en ese lugar elegido.
Hoy os proponemos un juego. Hemos juntado a dos biólogos. Uno de ellos periodista, Manuel Seara, director del programa de ciencia de RNE “A hombros de gigantes”. El otro biólogo, Raúl de Tapia que es Raúl Alcanduerca, botánico, mejor dicho, botanófilo, poeta, autor del Herbario Sonoro de este bosque… Dos biólogos charlando sobre si “Es posible sobrevivir sólo con plantas”… Porque, como dice Raúl, hace dos millones de años que somos homínidos y siempre hemos dependido de lo que hay fuera… Dice también que, genéticamente, estamos adaptados… Llegarás a tus propias conclusiones… ¿Serías capaz de sobrevivir durante un tiempo sólo alimentándote de plantas silvestres? ¿Tendrías ese conocimiento botánico en los archivos de tu memoria ancestral?
Para contribuir a contestar a esta pregunta contamos con las historias y los conocimientos de los miembros de la Comunidad del Bosque, con Óscar Prada Campaña, Raúl de Tapia, Gustavo Duch, Mar Verdejo, Ignacio Abella, José y Bernabé Moya y la inspiración musical de Neuman, capaces de alojar dudas y certezas en nuestro discurso con su inspirador trabajo, “If”.
Nos acompañan los integrantes del Club de la Hojarasca de Radio 3, formado por Marta Iraeta, Isabel Ruíz Lara, Alvaro Soto, Gustavo Adolfo B., José Manuel Sebastián, la Pequeña Alba y el miembro aglutinador de sentido común, Julio Valverde…
Así que hoy cálzate las botas de caminar por campos y bosques, no olvides tu mochila y tu herbario y tu “Dioscórides” para recolectar y añade, sólo, lo más indispensable… Porque estás a punto de entrar en territorio habitado por plantas silvestres y por 150.000 años de historia como homo sapiens en mutualismo con las plantas… ¡Territorio conmovido! ¡Arriba las ramas!
