Los entornos naturales ayudan a retrasar el deterioro físico

Mucho se ha hablado de las bondades de vivir cerca de la naturaleza, de los beneficios que aporta a la salud poder caminar y respirar en los entornos naturales. Unos beneficios que inciden también en el proceso de envejecimiento, tal y como se constata en el estudio llevado a cabo por investigadores del Ciberesp en el Instituto de Salud Global de Barcelona, en el que se ha analizado cómo incide ese entorno natural en el declive físico de las personas mayores.